Por: Rosa Campusano
Con tan solo siete años, Darihel Mesa, estudiante del Instituto Politécnico Loyola (IPL), escribió su primer libro de poesía titulado El rostro de mi verso, con el que logró el calificativo del “poeta más joven del mundo”. Su pasión por la escritura la lleva en sus venas, influenciado por sus padres, que también son escritores, y la que describe como su mundo aparte, donde puede ser él mismo.
Darihel, del quinto año del Técnico de Electromecánica de Vehículos, ha podido sobrellevar el amor-odio que siempre se ha vinculado a la interacción entre los amantes de las matemáticas y los de la literatura, sobre todo en una institución que tiene fama de ser "numérica" al convertirse en un referente de los maestros a la hora de hablar de la lectura y la escritura, pues él no solo escribe, también recita sus poemas. Sus primeros versos los presentó en público de manera oral en el Festival de Poesía en la Montaña, Jarabacoa, y en la Feria Internacional del Libro en Santo Domingo.
Sobre la pregunta de si el IPL es sinónimo de matemáticas aclaró que: “Loyola es sinónimo de muchas cosas, porque es tanto lo que abarca y lo que se aprende que me atrevería a decir que es sinónimo de todo en cuestión de materias”. Y en cuanto a su manera de sobrellevar la literatura y la matemática, agrega que “nunca ha sido un problema, en ambos me desarrollo muy bien y he sabido separar una de la otra y darle su espacio a cada cual”.
Con tan solo cinco años, Darihel pasó a ser parte de la familia Loyola de la cual reconoce que “ha influenciado en parte en mi amor por la lectura gracias a que, de cierta forma, ha fortalecido ese sentimiento de querer expresar el cómo me siento, el qué siento, y de igual modo influye en cómo expresarlo”.
A sus 16 años Mesa se define “como un joven escritor que intenta ser la mejor versión de él y que está en busca de una mejora, no solo personal, sino colectiva, porque busco ayudar a otros chicos como yo a despertar esa pasión por la lectura fundamentalmente. Soy un sinnúmero de talentos y deseos compartidos”.
A la Feria del Libro llega gracias a la Fundación Literaria "Aníbal Montaño" (FLAM) y las actividades en las que participaba leyendo o recitando sus poemas cuando era pequeño. Ese punto de partida fue el que le abrió las puertas para tener un lugar de cierto reconocimiento y ser convocado a otras actividades.
Actualmente promociona su libro Pacto con tu nombre, y que a opinión del profesor Marcial Báez “es una invitación a reinventarnos desde la voz del poeta hasta esa agonía de saber de nosotros lo humano en cada verso que nos duele, en cada palabra que invade nuestra mente, llevándonos a ser desde su nombre”.
“Voy a pensar que hay un sí para mi existencia, voy a pensar que no soy real: tomar un lapicero, cortar mi sangre como tinta, tinta llena de recuerdos que atormentan los pensamientos de aquella vida; vengo a explicar el lado oscuro que ronda mi puerta noche tras noche buscando una respuesta a su pregunta, buscando el amor que no existe”, es uno de los versos del libro.
Un poco más sobre Darihel:
Se alfabetizó con el método FLAM a través de la poesía. Pertenece a la Promoción 101 niños poetas de San Cristóbal y a los talleres literarios Mi Barrio en Letra.
Sus primeros textos poéticos fueron publicados en las antologías 101 Niños poetas de San Cristóbal (2011), Duarte sueña y otros poemas a la patria (2014), Mi muñeca y otros juguetes tradicionales (2016) y Simiente de mi voz (2022). En 2014 publicó su primer libro de poemas, titulado El rostro de mi verso.
Actualmente está escribiendo un libro de cuentos que tiene pautado presentar en el evento académico "Loyola escribe 2025".